martes, 1 de julio de 2014

El vibrante discurso de Pablo Iglesias en el Parlamento europeo y la mezquina doble vara de medir de la derecha



El conservadurismo europeo y la supuesta socialdemocracia, que no es en el presente sino un títere de la Troika, el FMI y la banca alemana, eligió en el Parlamento Europeo al socialdemócrata (?) Martin Schulz, en virtud de un pacto a imagen y semejanza  del que gobierna en la dueña de la Eurocámara y todos los estamentos de la UE, Alemania. Schulz obtuvo 409 de los 723 votos. El líder de Podemos y portavoz de la Izquierda Europea, Pablo Iglesias, consiguió tan solo cincuenta y un votos. Sin embargo, su vibrante discurso puso en píe a más diputados de los que lo votaron, porque habló claro y recordando a todos que Europa es de los europeos y no de la oligarquía financiera. (Podéis leer su cautivador discurso a continuación de este artículo)

 Y mientras en el Parlamento europeo Pablo Iglesias concitaba la admiración de muchos diputados, aún incluso de aquellos que no coinciden con su discurso,  en este país continua su criminalización y la de Podemos por parte de la derecha más reaccionaria y la prensa de la caverna, acusando ambas de gravísimas delitos, como el de ser colaborador de ETA y otras lindezas propias de la ultraderecha. 

Esperanza Aguirre, en su blog, acusó a Podemos y a Pablo Iglesias de estar “con el chavismo, con el castrismo y con ETA". Para Aguirre todo lo que se diga negando esas afirmaciones son ‘palabrería’. La lideresa de las huídas considera que Pablo Iglesias "quizás colabora con la red de apoyo a sus presos. Esto hay que saberlo”, y, haciendo uso de la palabrería que reprocha a los demás, se extendió en su blog sobre las maldades del régimen de Maduro, donde dijo ‘se apalea a la oposición’. 

La derecha reprocha a los dirigentes de Podemos que ‘no condene a ETA’, sin embargo, el PP sigue negándose a condenar el fascismo franquista, e incluso lo alaba en actos públicos, como sucedió en una entrega de premios del Ministerio de Defensa celebrada en el Museo del Ejército, donde uno de los premiados, el presidente de la Fundación Infante de Orleans, Carlos Valle Torralbo, elogió al fundador de la Falange Española, José Antonio Primo de Rivera. En primera fila se encontraban el ministro de Defensa, Pedro Morenés, y los jefes de Estado Mayor de los tres ejércitos y nadie hizo objeción alguna a los elogios a tan siniestro personaje, creador de un movimiento que durante cuarenta años fue responsable de muchos de los crímenes cometidos por el franquismo, y cuyo fundador, tan elogiado por Valle Torralba, era defensor de la ‘dialéctica de los puños y las pistolas’. 

El PP se negó siempre a condenar el franquismo, del mismo modo que, al tiempo que critica a Iglesias por sus supuestas relaciones con Venezuela, bendice dictaduras como la de Obiang en Guinea o se pliega a los deseos de la dictadura china, anulando la Justicia Universal para plegarse a los deseos de los sátrapas orientales. Son las distintas, y cínicas, varas de medir de un Gobierno hijo putativo del franquismo. 

Interesante artículo con dos vídeos de Monedero sobre las acusaciones estúpidas de la ultraderecha:





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